miércoles, 29 de enero de 2025

CICLO SOBRE AUTONOMÍA UNIVERSITARIA EN BRASIL




Como contribución al debate sobre la autonomía universitaria, Guilherme Ary Plonski me propone difundir en este blog las conclusiones del ciclo nacional sobre autonomía universitaria (de las instituciones públicas) que se está realizando en Brasil. Son cinco seminarios, uno en cada región. Ya tuvieron lugar en Florianópolis (organizado por la UDESC), en São Paulo (por la USP) y en Recife (por la UFPE). Los próximos serán en Belém (organizado por la UFPA, el 27 de marzo) y en Goiânia (por la UFG). Está previsto que el ciclo concluya con un seminario de síntesis en el Congreso Nacional, en junio, presentando las conclusiones y propuestas recogidas. 

Guilherme Ary es profesor senior de la Universidad de São Paulo, vinculado al Departamento de Administración de la Facultad de Economía, Administración, Contabilidad y Actuaria, así como del Instituto de Estudios Avanzados, del cual fue director. Es miembro titular de la Academia de Ciencias del Estado de São Paulo. Fue coordinador científico del Núcleo de Política y Gestión Tecnológica y vicecoordinador del Centro de Innovación de la USP. Fue también director superintendente del Instituto de Investigaciones Tecnológicas del Estado de São Paulo (IPT) y presidente de ANPROTEC. Integra o ha integrado órganos de dirección superior de numerosas entidades del Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación de Brasil. Fue coordinador de la Red Iberoamericana de Cooperación Empresa-Universidad del Programa CYTED, director de ALTEC y miembro del Advisory Council de la IASP. Es miembro de Junta Internacional de Gobernadores del Technion – Israel Institute of Technology. 

Contribuye a este blog con la propuesta de realizar una reflexión latinoamericana acerca de la autonomía universitaria, comparando las realidades de cada país, identificando los consensos y también las diferencias que surgen de las distintas realidades académicas. A su sugerencia, Transcribo las conclusiones de los dos primeros seminarios. Se trata de dos documentos titulados “Carta de Florianópolis” y “Carta de San Pablo”.

CARTA DE FLORIANÓPOLIS 
Florianópolis, 12 de junio de 2024 

Informe final del evento 
El Seminario de Autonomía Universitaria fue el primero de una serie de cinco eventos que se realizarán en todas las regiones de Brasil. Este seminario tuvo como objetivo abordar la importancia de la Autonomía Universitaria como factor de desarrollo en el país, clarificando su relevancia para las Instituciones de Educación Superior (IES) y para la sociedad en general. Con un programa conciso y objetivo, el evento se realizó en un solo día en la Asamblea Legislativa de Santa Catarina con el apoyo de la Comisión Parlamentaria de Educación y Cultura, comenzando a las 9 de la mañana con varias conferencias. A partir de la colección "Autonomía Universitaria: fundamentos y realidad", organizada por profesores de la UDESC, e impulsada por el desafío lanzado por la USP, este seminario buscó promover el debate y la comprensión sobre el tema, y contó con la participación de rectores de universidades estatales y federales. 

Paneles de conferenciantes sobre Fundamentos y realidad: 
"Autonomías necesarias e inconvenientes" – Ex ministro de Educación; Exrector Cristovam Buarque/UnB - Relator: Maria do Carmo Sobral (UFPE); (USP)
"Autonomía en las Universidades de São Paulo" – Profesor Dr. Guilherme Ary Plonski/IEA - USP – Relatora: Profesora Anelise Zimmermann (UDESC); (CNN) 
"Autonomía Universitaria: teoría y práctica" – Rector Irineu Manoel de Souza/UFSC – Relator: Bernardo Meyer (UFSC); 
"Autonomía universitaria en la UDESC: logros y retrocesos" – Profesor Dr. Adil Knackfuss Vaz/UDESC – Relatora: Sonia Pereira Laus (UDESC); 
Autonomía Universitaria: ¿quimera o concreción? – Vicerrectora Clerilei Aparecida Bier/UDESC – Relatora: Amanda Marina Lima (UDESC). 

Conclusiones 
La autonomía universitaria es indiscutible como idea general implementada de manera inédita en la Constitución Federal de 1988 y en las Constituciones de los Estados como un logro posterior a la redemocratización del país. El momento de incertidumbres y transformaciones ambientales y sociales que se están viviendo a nivel global renueva la necesidad de la efectiva autonomía universitaria, combinada con el compromiso con la sociedad y la humanidad en su conjunto. Para ello, es fundamental tener la autonomía de pensar libremente, de posibilitar la planificación a mediano y largo plazo de las actividades de Enseñanza, Investigación y Extensión, y de crear y aportar alternativas a los desafíos que hoy tiene la humanidad, en una época de límites e incertidumbres. 

Las instituciones universitarias surgen en la historia de los valores humanísticos y del entusiasmo por la investigación de la realidad a partir de valores universales que incluyen el bien común. Fue el ambiente universitario el que acercó a la comunidad los avances que se experimentan actualmente en los más diversos sectores. Muchas de las tecnologías y utilidades en la vida cotidiana de las personas nacen de la investigación académica. En este contexto, es función de la universidad ampliar continuamente sus estrategias de difusión y comunicación con los diversos sectores sociales. Asimismo, el diálogo constante entre estos sectores es fundamental para la coproducción de conocimiento y prácticas innovadoras, no solo en el ámbito de las organizaciones públicas y privadas, sino principalmente en la educación básica. Este posicionamiento dialógico y receptivo a las demandas colectivas presupone la responsabilidad de las instituciones universitarias. 

La realización de un compromiso de esta magnitud depende de la realización de la autonomía en sus dimensiones de gobernanza organizacional, gestión de personas y toma de decisiones. En cuanto a la gobernanza organizacional, es fundamental garantizar recursos presupuestales para fines de planeación, búsqueda de nuevas fuentes de financiamiento para mejorar la infraestructura y políticas de permanencia estudiantil como forma de prevenir la deserción escolar. En cuanto a la gestión de personas, la valoración de los profesionales universitarios es un elemento fundamental para la calidad de las actividades de docencia, investigación y extensión. La autonomía en la toma de decisiones es uno de los factores que permitirá a las universidades atender las singularidades en el contexto en el que se insertan. 

Por último, es necesario replantear los conceptos de universidad, muchas veces asociados a un mero lugar de obtención de diplomas, para que pueda ser reconocida como un entorno productor de ideas, ciencia y tecnología. La autonomía universitaria va acompañada de un compromiso con quienes la financian, es decir, con el conjunto de la sociedad. El núcleo de la lucha por la autonomía radica en la importancia de producir ciencia y tecnología, de las cuales las universidades públicas son el principal locutor. El propósito es el desarrollo de la sociedad y la libertad intelectual con el fin de mantener la relevancia de la universidad para la sociedad. La autonomía universitaria como principio constitucional fundamental es un elemento inseparable del compromiso con el bien común. 


CARTA DE SÃO PAULO
São Paulo, 28 de agosto de 2024 

Informe final del evento 
El segundo seminario del Ciclo Nacional de Autonomía Universitaria se realizó en el Instituto de Estudios Avanzados, en colaboración con el Rectorado de la Universidad de São Paulo. El evento forma parte de una serie de cinco seminarios, uno por región del país, cuyo objetivo es impulsar un movimiento académico multiinstitucional en torno a la autonomía universitaria, un tema crucial para la educación superior nacional y, por extensión, para el desarrollo de Brasil. Pocas universidades públicas brasileñas gozan de autonomía financiera, lo cual es esencial para que se materialicen las demás áreas de autonomía. Las universidades estaduales de São Paulo (USP, Unicamp y Unesp) alcanzaron la autonomía en 1989, hace 35 años. La Universidad Estadual de Santa Catarina (UDESC) lo obtuvo en 1991. 

El programa incluyó las siguientes actividades: 
Apertura: Carlos Gilberto Carlotti Jr. (Rector de la USP), Vahan Agopyan (Secretario de Estado de CTI), Marco Antonio Zago (Presidente de la FAPESP), Roseli de Deus Lopes (Directora del IEA) y Guilherme Ary Plonski (Profesor Titular del IEA) 
Testimonio sobre los 35 años de autonomía universitaria en São Paulo: José Goldemberg (Rector de la USP en ocasión del Decreto 29.598/89) • Conferencias magistrales a cargo de dos expertos en el tema "Universidades": Cristovam Buarque y Simon Schwartzman 
Informe y conclusiones del 1er Seminario, realizado el12/6/2024 en la Asamblea Legislativa del Estado en Florianópolis, organizado por la Rectoría de la UDESC: Clerilei Aparecida Bier (Rectora Interina de la UDESC) 
Panel sobre "La saga de la autonomía de las universidades paulistas", a cargo de personalidades involucradas en el proceso de autonomía de la gestión financiera de las universidades estaduales paulistas: Luiz Gonzaga de Mello Belluzzo, Frederico Mazzucchelli y Carlos Vogt (todos profesores de la UNICAMP y ex secretarios de Estado), moderado por Antonio Meirelles (Rector de la UNICAMP)
Panel sobre "Caminos de autonomía", centrado en "Avances legales" (Nina Ranieri – USP) y "Reforma tributaria" (Sebastião Guedes – UNESP), moderado por Pasqual Barretti (Rector de la UNESP) 
Panel con la "Perspectiva de los socios", acercando las voces del sector empresarial (José Fernando Perez – Recepta Biopharma) y de la sociedad civil (Eduardo Saron – Fundación Itaú), moderado por Marimélia Porcionatto (miembro del Consejo Directivo de la SBPC) 
Presentación de las conclusiones preliminares del 2º Seminario, a cargo de Arlindo Philippi Jr. y los relatores Paulo Nussenzveig, Marcos Buckeridge, Aluísio Segurado, João Mauricio Gama Boaventura, Ana Lucia Duarte Lanna y Rodrigo Calado (todos profesores de la USP) 
Lanzamiento del 3º Seminario (Maria do Carmo Sobral – UFPE) y prelanzamiento del 4º y 5º Seminario (Antonio Maués – UFPA; Fausto Miziara y Tasso de Souza Leite – UFG)
Lanzamiento del libro "Autonomía Universitaria: fundamentos y realidad": Sandra Ramalho e Oliveira (UDESC) 

El Seminario estuvo abierto a la participación del público. La grabación de video está disponible en http://www.iea.usp.br/midiateca/video/videos-2024/ciclo-nacional-de-seminarios-autonomia-universitaria-fator 2ª reunión de desarrollo del país

Contexto
La autonomía universitaria es un principio fundamental que garantiza a las instituciones de educación superior la libertad académica, la flexibilidad administrativa y la previsibilidad financiera. Es un mecanismo exitoso, adoptado en varios países. En Estados Unidos, por ejemplo, la autonomía se remonta al siglo XIX, proporcionando un expresivo desarrollo científico y económico, que continúa en los siglos siguientes. Es posible concluir sin temor a equivocarse que a los países que otorgaron autonomía a sus universidades les fue mejor económicamente y desarrollaron sociedades más justas y con mayor bienestar. Brasil también ha avanzado, pero paga el precio de haber otorgado autonomía a las universidades mucho más tarde. La reforma universitaria de 1968 marcó un hito en el avance de la educación superior nacional, desencadenando una serie de movimientos que culminaron con la inserción de la autonomía universitaria en la Constitución Federal de 1988. A partir de entonces, el sistema universitario brasileño, principalmente por instituciones federales y estatales, comenzó a funcionar con mayor eficiencia, dando lugar a una ola de producción de conocimiento sin precedentes, con repercusiones positivas en la posición global del país. 

En la actualidad, la autonomía universitaria es constitucional, y se describe de la siguiente manera en su artículo 207: "Las universidades gozan de autonomía didáctico-científica, administrativa y de gestión financiera y patrimonial, y obedecerán al principio de inseparabilidad entre la docencia, la investigación y la extensión". Por otra parte, la autonomía está modulada en la propia Constitución Federal, y la universidad debe seguir los principios de educación descritos en el artículo 206, así como las directrices y bases de la educación nacional prescritas en la Ley Nº 9394/96. 

La visión de los gestores universitarios Exrectores y rectores presentes en el Seminario convergen en los siguientes argumentos: 
1) Se ha garantizado la libertad de pensamiento con autonomía, permitiendo a cada universidad determinar qué y cómo enseñar e investigar;
2) La autonomía universitaria no es solo para la universidad, sino para la sociedad en su conjunto, que se beneficia de diversas maneras de lo que la universidad produce en términos de formación, investigación y extensión estudiantil;
3) Cuanto mayor sea el grado de autonomía, mayor será la responsabilidad, ya que la universidad necesita autogestionarse desde el punto de vista académico, administrativo y financiero, en un sistema de gestión compartido que considere las opiniones de los profesores, personal técnico-administrativo y estudiantes;
4) La gestión autónoma es demandada por la sociedad en general de diversas maneras, tanto directamente por los ciudadanos como por las instituciones públicas y privadas, la prensa y las instancias políticas;
5) La autonomía es parcial en varios aspectos, ya que las universidades deben someter sus normas a la legislación vigente. Solo pueden aplicar los recursos financieros de acuerdo con las normas que rigen las contrataciones públicas en el país. No son libres de contratar profesionales, estando obligados a seguir estrictamente las normas aplicables al servicio público en general. Sus cuentas son fiscalizadas permanentemente por los órganos de control y su desempeño es observado por el Ministerio Público; y 
6) Examinando, a modo de ejemplo, los resultados alcanzados por las universidades estaduales de São Paulo, queda claro que, incluso con las limitaciones expuestas, la autonomía no es un privilegio, sino una necesidad. 

La mirada de los intelectuales que piensan en la universidad 
Al ser un proceso dinámico que evoluciona con los cambios en la sociedad, la autonomía universitaria debe verse en el contexto de un sistema cambiante. La sociedad mundial, incluido Brasil, se encuentra en un tramo complejo de su trayectoria, en el que se presentan múltiples caminos. En la encrucijada civilizatoria en la que nos encontramos, la universidad es un factor esencial como centro de pensamiento y producción de posibles soluciones y, por tanto, su autonomía es imprescindible. A su vez, los profundos y rápidos cambios imponen a la universidad la obligación de repensarse y reformularse. Los principales puntos señalados en las transiciones que se están produciendo en la sociedad actual incluyen el cambio climático global, el avance de las redes sociales y sus consecuencias para la política, así como el avance de la Inteligencia Artificial. Esto, en particular, implica cambios rápidos en los tipos de ocupaciones que los jóvenes de hoy tendrán a su disposición en un futuro próximo. Otros puntos de atención son el cambio demográfico, la corrosión de la democracia, las guerras y las migraciones. 

Estos temas fueron abordados en el Seminario, y quedó claro que sin universidades fuertes -y la fuerza académica del pensamiento está directamente ligada a la autonomía- no hay forma de vislumbrar caminos posibles para este mediados de siglo. Crisis similares a las actuales ya han caído sobre la humanidad. Así, es probable que, incluso con buenas ideas, políticas públicas bien fundamentadas y buena organización, nuevas crisis se impongan a la sociedad brasileña en la segunda mitad de este siglo. Por ello, una vez más, es fundamental mantener la autonomía universitaria. Debilitarla reduciendo su autonomía significa debilitar a la sociedad en su conjunto, haciéndola vulnerable en lugar de resiliente, como generalmente se desea. 

La idea misma de autonomía es diversa entre quienes la piensan. En sentido figurado, la autonomía efectiva de una universidad se encuentra en algún punto en un gradiente entre los extremos del 100% de tutela (por lo tanto, del 0% de autonomía) y del 100% de autonomía. Se puede considerar que las universidades federales se sitúan en torno al 50% en esta escala, mientras que las universidades estatales con autonomía financiera se sitúan en el 70% - 80%. Así, podemos pensar en grados de autonomía, en función de la etapa en la que se encuentran las universidades: autonomía limitada, en torno al nivel del 50%; autonomía integral, en torno al 70-80%; y la autonomía total, que sería el grado más alto, en una visión realista estaría en el orden del 90-95%. 

Es fundamental que se mantenga la autonomía en las universidades estatales y se aumente en las universidades federales, para que la sociedad brasileña en todas las regiones del país pueda beneficiarse de las ideas producidas en las universidades públicas, lo que repercutirá en un mayor desarrollo socioeconómico sostenible. El momento de reforma tributaria en el que se encuentra el país impone la necesidad de resoluciones cruciales para el futuro. La transición se llevará a cabo de forma gradual, hasta alcanzar el 100% en 2029. El Grupo de Trabajo creado por el Consejo de Rectores de las Universidades de São Paulo llegó a una tasa del 8,63% de los ingresos tributarios netos del Estado, estimados por los parámetros de la nueva configuración tributaria, como equivalente al valor de las transferencias actuales, lo que permitiría mantener el nivel actual de autonomía financiera. 

La visión de las instituciones que actúan con la universidad
La experiencia de los aliados pone en evidencia los aportes de la universidad al desarrollo del país. Recomienda, sin embargo, que se revisen los mecanismos internos, entre ellos la gobernanza universitaria, incluidos los procesos de elección de líderes y la implementación de las decisiones tomadas por la administración. La rigidez del marco regimental restringe en cierta medida la autonomía de la universidad en su planificación, toma de decisiones y acciones, además de reforzar la endogamia y limitar la interacción con los participantes externos. La rendición de cuentas es un elemento fundamental para la relación con el financiador de la universidad, que es el contribuyente, representado por el gobierno

Un aspecto por considerar para fortalecer la autonomía es la diversificación de las fuentes de financiamiento, a través de la ampliación y consolidación de las interacciones con otros sectores de la sociedad. La universidad tiene la tarea de pensar y ayudar a establecer políticas públicas que las favorezcan. Abarcan la formación de personas altamente cualificadas, con especial atención a la inserción de másteres y doctores en organismos públicos y privados, tanto los que tienen fines económicos como los del tercer sector. También deben estimularse las asociaciones para la innovación en todos los matices, como forma de inducir el desarrollo económico y social. Así, el 2º Seminario del Ciclo Nacional llega a las siguientes conclusiones generales: 
a) Existe una relación favorable entre la autonomía universitaria y el desarrollo socioeconómico; 
b) La sociedad contemporánea se encuentra en una encrucijada compleja, cuyas soluciones y caminos deben ser pensados por las universidades; 
c) Las universidades necesitan utilizar la autonomía de la que gozan para producir cada vez más soluciones que garanticen el bienestar de la población, intensificando así su contribución a la sociedad de la que forman parte; 
d) Brasil necesita mantener y ampliar la autonomía de sus universidades, con el fin de proporcionar un futuro mejor a las generaciones futuras; y 
e) El nivel de autonomía no debe ser inferior al 80% (autonomía integral), como lo demuestran los buenos resultados de las universidades que se encuentran en este nivel; Para el funcionamiento ideal de las universidades brasileñas, la sociedad debe aspirar a que todas ellas avancen hacia la plena autonomía.

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